30 de noviembre de 2008

Jerzy Ficowski (1924-2006)

no conseguí salvar
ni una vida

no supe detener
ni una bala

por eso recorro cementerios
que no existen
busco palabras
que no existen
corro

en una ayuda no solicitada
en un tardío auxilio

quiero llegar a tiempo
aunque sea demasiado tarde

De La muerte del unicornio

29 de noviembre de 2008

Kornel Filipowicz IV

La felicidad de vivir

Blaiberg hombre
Con un corazón transplantado
Dijo
Veintiún días después
De la operación cito
Hoy me he lavado me he afeitado
Y me he puesto solo los calcetines
Y ha sido el día más hermoso
De mi vida.

De Di esta palabra

27 de noviembre de 2008

Kornel Filipowicz III

Kornel Filipowicz es uno de los más destacados creadores polacos de narraciones breves. Compañero sentimental de la Premio Nobel polaca de Literatura, Wisława Szymborska -a él le dedicaría la poeta el magnífico poema "Un gato en un piso vacío-, es autor de más de 30 obras de narrativa, de varios guiones cinematográficos y de dos libros de poemas, de los cuales Di esta palabra vería la luz dos años después de su muerte.

Un gran descubrimiento

Cierto filósofo
Pasó largos años dedicado a darle vueltas
Al sentido de la existencia y lo absurdo de la muerte
Y también a pensar en el principio y el fin del mundo
En Dios el tiempo la conciencia el devenir
Hizo integrales diferenciales
Elevó a potencias sacó raíces cuadradas
Pero no le salían las cuentas
No podía entender nada
Las cosas nunca formaban un todo

Finalmente cuando era ya muy viejo
Cuando empezó a perderse en las conversaciones
Y confundir las cifras
Tuvo una repentina iluminación
Se dio cuenta
De que la imposibilidad de entender
Todo aquello
Se desprendía simplemente de la falta
De categorías conceptuales adecuadas

Realizado este gran descubrimiento
Murió.

De Di esa palabra

26 de noviembre de 2008

Kornel Filipowicz II

En la traducción de este poema hay dos momentos delicados:
"La esperanza es la madre de los tontos" y "la esperanza es un valor esperado".
"La esperanza es la madre de los tontos" es la traducción literal de un refrán polaco que tiene su origen en el "Spes mater stultorum" latino. No he encontrado un equivalente en español, pero considero que la traducción literal recoge claramente el sentido del refrán polaco por lo que he optado por esa versión..
En el segundo caso -"la esperanza es un valor esperado"-, el término "valor esperado" -conocido también como "esperanza matemática"- no es susceptible de ser sustituido por otro término, ya que la fórmula que se recoge a continuación [E (X)] sólo responde al mismo.
La última palabra -espérance- aparece en francés en el original.
Acepto ideas. ¿Se le ocurre a alguien alguna otra salida?



Breve conversación

No es serio es más es una tontería
Usted me está tomando el pelo hablando de la esperanza
La esperanza es la madre de los tontos

Cómo me iba a atrever a reírme de usted
Estoy hablando totalmente en serio
Usted quizá no sepa usted quizá no haya leído
Pero existe un concepto en matemáticas:

La esperanza es un valor esperado
Una variante aleatoria de X
Se expresa con la fórmula: E (X)
E – de la palabra espérance.

De Di esa palabra

Leszek Engelking (1955)

Leszek Engelking -poeta, traductor, crítico literario, autor de relatos cortos-, es uno de los pioneros del haiku en lengua polaca. Sus haikus, métricamente impecables, se enmarcan en muchas ocasiones en una realidad urbana propia des nuestros tiempos.

Hay luna llena
en el auricular
calla la noche

-

Vacías gradas
contempla el campo sola
una libélula

-

Nunca la ha visto
pero siempre describe
la flor del guindo

-

Tren cercanías
quedan restos de sueño
la luna mira

-

Lluvia de estío
en la charca del prado
chorrea el agua

-

La Vía Láctea
allí y aquí estás tú
en la cabina

-

Encuentra un viudo
de noche en el sofá
un frío espejo

De Y otros poemas

25 de noviembre de 2008

Kornel Filipowicz (1913-1990)

Un momento de silencio

Este silencio mutismo
Esta calma
No significan que no ocurre nada
Que pasan
Las horas vacías los minutos

Es sólo una pausa
Un instante de silencio como en la música

Después de algo importante
Que ya ha sucedido
Y antes de algo
Todavía más importante
Que está aún por suceder.

De Di esa palabra

24 de noviembre de 2008

Artur Międzyrzecki IV

¿Eres capaz de imaginarte...?

La ausencia
¿Eres capaz de imaginarte
La ausencia
No como antónimo
De algo que es y respira
Vacío en la cotidiana presencia de las cosas
Voz que apela a la intermediación del símbolo
Estratagema de la dialéctica
Sino como transparencia infinita
Donde no se conforman las imágenes
Una incolora monocromía invisible
La ausencia
Lo que no está
No está en ninguna parte?

1982

De Guerra de nervios

23 de noviembre de 2008

Artur Międzyrzecki III

Escatología de las hormigas

El fin del mundo – dicen las hormigas Se nos viene encima
la apocalíptica niña con su cazamariposas
Su sandalia espanta a las lagartijas Su trenza pelirroja
incendia el prado Arden botones de oro candelarias amapolas silvestres

1961

De Hermosos cansancios

22 de noviembre de 2008

Artur Międzyrzecki II

El 5 de noviembre de 1996 El País recogía la noticia de la muerte de Artur Międzyrzecki -presidente del Pen Club polaco, vicepresidente de la Federación Internacional del PEN Club- fallecido tres días antes.
En el artículo se mencionaba también la faceta de traductor del poeta y narrador y se decía que "era también famoso por sus traducciones de obras dramáticas y poemas de Shakespeare, Molière, Racine, Rimbaud, Apollinaire y Aragon, además de poesía contemporánea europea y americana".
El lector español, sin embargo, poco podía imaginar que acababa de morir el traductor de Antonio Machado al polaco (Antonio Machado y Ruiz, Poezje wybrane (Poemas escogidos) Editorial Ludowa Spółdzielnia Wydawnicza, 1985) y de algunos poemas de Jorge Guillén.


El Siglo de Oro

Qué más da que en la corte real
Campen a sus anchas bufones y gnomos
Calabacillas llamado el bobo de Coria
el fanfarrón Barbarroja
Pablo de Valladolid desequilibrado declamador

El Siglo de Oro es el Siglo de Oro
Los favoritos de Felipe IV no tienen aquí nada que ver
Los que cuentan son los chupatintas ajenos a palacio
Góngora Calderón Lope de Vega Tirso de Molina

Y da igual a fin de cuentas a quién retrata tan magníficamente Velázquez
Al Conde Duque a caballo o al bufón Hodson con un perro

1979

De Guerra de nervios




21 de noviembre de 2008

Artur Międzyrzecki I

Uno querría hacer algo

Uno querría hacer algo pero qué
Uno querría ir a algún lugar pero adónde
Uno querría salvar algo pero cómo
Uno querría dormirse y despertar pero cuándo

Y uno querría olvidar a ese idiota
Que identifica conmigo este monólogo

1979

De Guerra de nervios

19 de noviembre de 2008

Wisława Szymborska habla de Artur Międzyrzecki

Es de todo el mundo sabido que Wisława Szymborska huye de las entrevistas y evita hablar sobre literatura -aunque no siempre haya sido así; pero sobre ese tema, en otro momento-. Quizá por ello cuando en 2006 la editorial a5 publicó la antología de Artur Międzyrzecki bajo el título Wiersze 1946- 1996 (Poemas 1946- 1996) como primer volumen de una nueva serie -Poesía viva-, pocos imaginaban que la selección y el prólogo pudieran ser obra de la Premio Nobel polaca. La sorpresa era tanto mayor cuando al final del libro leíamos que la idea de la serie había surgido algo más de dos años antes en una conversación de los editores (léase del importante poeta polaco, Ryszard Krynicki) con Szymborska y que la serie nacía para recordar los poemas de poetas cercanos, que habían fallecido, y salvarlos así del olvido. Poesía viva, de la mano de Wisława Szymborska, quería salir al paso de una creciente y generalizada indiferencia, y de un desconocimiento que llevaban a la desaparición.


No tengo el don de escribir sobre poesía. A veces, si acaso, hablo de poesía entre amigos, cuando un poema o un libro de poemas me parece importante por algún motivo. Pero incluso en esos casos empiezo y acabo con un par de frases. ¿Cómo? ¿Que no lo habéis leído aún? Pues lo tenéis que leer sin falta, vale la pena. Es lo mismo que tengo ganas de hacer en estos momentos, y añadir un gran signo de admiración, pero qué le vamos a hacer, siento que tengo que añadir algo más.
Trabajar en la selección de poemas de Artur Międzyrzecki ha sido para mí un placer que se ha visto acompañado permanentemente por la sorpresa. El poeta, muerto hace diez años, ha dejado una obra de casi cincuenta años, por lo tanto no habría sido extraño que la mayoría de sus poemas se hubiera enfriado ya en la dignidad histórico literaria. Pero no ha sido así. Sus poemas dan la sensación de haber sido escritos apenas ayer y ser necesarios mañana.
Aprecio esta poesía por la permanente presencia de una estoica valentía, me encanta su melancólico humor y admiro esa ágil imaginación, se puede comparar con un calidoscopio de infinitos cristales. Cada giro, por mínimo que sea, del mágico tubo da un nuevo modelo, un nuevo poema.
Artur. Lo leía todo el tiempo, lo veía raras veces. En una ocasión le dije que si hubiera tenido un hermano, me habría gustado que fuera como él. Empezó a reírse y me pregunto porqué. Primero, –le respondí- porque sería un hermano en el que se puede confiar. Y segundo, porque podría ir por la calle inflada como un pavo real por ser la hermana de un poeta tan bueno.


Wisława Szymborska

18 de noviembre de 2008

Julian Kornhauser III

Crítico literario, escritor, poeta, catedrático y traductor de literatura serbia y croata, Julian Kornhauser, cofundador del grupo literario Teraz (Ahora), es uno de los máximos representantes del movimiento poético de los años 70 conocido con el nombre de Nowa fala(Nueva ola). Publica un primer libro de poemas en 1972, al que seguirán otros 14. Origami, aparecido en 2007, es su última obra.

Origami

En el tren de Cracovia a Auschwitz
tres jóvenes japoneses
hacen origamis
para matar el tiempo.
Dejamos atrás colinas y bosques,
y un cisne de papel
mira somnoliento la ardiente
hierba.

De Origami

17 de noviembre de 2008

Julian Kornhauser II

Split

Voy por toda la ciudad
de noche, hasta el puerto.
Cae una fina y cálida lluvia.
Frente a mí oigo solamente
los pasos del mar.

De Origami

16 de noviembre de 2008

Julian Kornhauser (1946)

Aquí

Escucho música, miro por la ventana
cómo se pone el sol.
El ligero temblor de una rama, la luz amarilla
de las farolas, un hombre que compra el periódico en el quiosco.
Estoy aquí en mi lugar,
aunque lejos de mí
y de mi propio e irrepetible
pasado.

De Origami

Agnieszka Maciąg III

Conocí a Agnieszka Maciąg en Varsovia en ese café-editorial-librería tan especial que es Czuły barbarzyńca, así llamado por la obra de Hrabal (me suelo preguntar cómo se podría traducir, ¿El bárbaro tierno?, ¿El bárbaro sentimental?). Fue al poco de la publicación de su libro, con ocasión de la celebración de uno de los así llamados "cumpleaños" de Czuły barbarzyńca. Me la presentaron como reciente autora de un libro de poemas, y como mi conocimiento del mundo de la moda y del mundo del espectáculo era (y es) prácticamente nulo, al cabo de un par de días pude abordar la lectura de las zapatillas verdes sin ningún tipo de prejuicio.

enamorados

en sus sueños
danzan descalzos
en playas desiertas
a ritmo de bossa nova

el sol se pone
sangrante
como en las postales
de las vacaciones

y después se despiertan
en la cubierta inferior
de la realidad

De las zapatillas verdes

15 de noviembre de 2008

Agnieszka Maciąg II

Ellas

las chicas de las portadas y los telediscos
no se resfrían
no tienen facturas sin pagar
ni los párpados hinchados por las mañanas

no duermen en pijamas a rayas
sus padres no se les ponen enfermos
sus hijos no tienen inesperadas anginas

no se les queman los pasteles
siempre tienen qué ponerse
no tienen ojeras
ni espinillas ni preocupaciones

nunca tienen frío
aunque en las vallas publicitarias
estén apenas en ropa interior

De las zapatillas verdes

14 de noviembre de 2008

Agnieszka Maciąg (1969)

En 2006, en Cracovia, Wydawnictwo Otwarte (Editorial Abierta), haciendo honor a su nombre, saca al mercado un libro de 55 poemas bajo el título de zielone pantofle (las zapatillas verdes). Hasta aquí nada sorprendente. Sí lo fue, sin embargo, el nombre de la autora: Agnieszka Maciąg. Conocida hasta ese momento sobre todo como modelo, nadie parecía presumirle inclinaciones poéticas -si bien había tenido distintos escarceos con la pintura, el cine, la fotografía y la música-. Está claro que las apariencias, son sólo eso, apariencias.

soy

vivo
en una gran ciudad de cemento

con las colillas
mido el estado de mi angustia

De las zapatillas verdes

13 de noviembre de 2008

Piotr Maur III

Aquella mañana en la que tropecé con el libro de Piotr Maur en la librería de la calle Franciszkanska de Cracovia, hubo un poema que provocó mi curiosidad por el misterioso poeta de Cracovia -digo misterioso porque no he logrado encontrar a nadie que lo conozca, ni tampoco a nadie que lo haya leído (seguiré intentándolo)-.

jugábamos al escondite
y justo cuando me tocó a mí pagar,
una de las niñas
se escondió en el pozo.
conté hasta cien
y después empecé a buscar.
los encontré a todos menos a ella.
esconderse bien
era entonces para nosotros una cuestión de vida o muerte,
aunque qué podíamos saber de esas cosas.
llenos de admiración y de una mal disimulada envidia
observamos cómo los bomberos
sacaban su cuerpo al anochecer.

De amor sin fin

12 de noviembre de 2008

Piotr Maur II

Encontré el último libro de Piotr Maur a principios de octubre en la librería que la Editorial Zielona Sowa tiene en la calle Franciszkanska de Cracovia. Eran las ocho y pico de la mañana, hora en la que habitualmente las librerías están cerradas en Polonia, pero ésta estaba abierta (era tan inhabitual el hecho que no me sorprendió encontrar a los tres o cuatro días un papel en la puerta que anunciaba el nuevo horario: a partir de las 11). Entré y aunque no sabría explicar el porqué, me llamó la atención uno de los libros de poesía. Me cuesta entender cómo aquéllos cinco milímetros del lomo de amor sin fin se abrieron paso hasta mi mirada. Abrí el libro, le eché un vistazo y decidí comprarlo. No había oído hablar de Piotr Maur. Su apellido, Maur (Moro), me resultaba curioso. Me llamó la atención su forma de escribir. Compré el libro y al llegar a casa entré en internet para saber algo más sobre él. En la página www.piotrmaur.pl encontré el siguiente poema:

esta casa es una trampa. encontré en el sótano
cinco gatos muertos y momificados,
los cadáveres de unos pájaros en el desván. no te hablé
de ello porque no quería preocuparte.
quería que fueras feliz y que pensaras que
después de todos estos años pasados en habitaciones
alquiladas, por fin teníamos nuestra propia casa.
no quería preocuparte. cada vez que el viento
cerraba una ventana o una puerta temía que nunca más
volviéramos a abrirlas. no quería asustarte.
te lo oculté tanto tiempo como pude.
quería que fueras feliz. te lo digo ahora
que creo que ya no vale la pena intentar conseguir nada.
no vale la pena albergar ninguna esperanza.
te lo digo ahora porque ya que nuestra casa
ha resultado ser una trampa
deberíamos pensar en administrar
cuidadosamente lo que todavía nos queda.

De 28 y 5

11 de noviembre de 2008

A modo de justificación (por si fuera necesaria)

Si escribir es una forma de relacionarse con la realidad, traducir es una forma de relacionarse con la realidad, con compañía previa. Esa compañía puede ser más o menos casual, más o menos justificada, más o menos comprensible para los otros. "Al trasluz" no es más que el testimonio de algunas de esas compañías.

Piotr Maur (1963)

Poeta y narrador polaco. Ha publicado tres poemarios 76 (1996), 28 y 5 (2002) y amor sin fin (2006)

esto pudo haberle sucedido a cualquiera
pero me sucedió justo a mí
esto pudo haber sucedido en cualquier momento
pero sucedió justo ahora
esto pudo haber sucedido en cualquier lugar
pero sucedió justo aquí
esto me tuvo que suceder a mí
porque justo yo me encontraba
en este momento y en este lugar
una lección para el futuro
en caso de ser una vez, mejor en ningún lugar
y en caso de no ser nunca, mejor en todas partes
o ser alguien totalmente distinto

De 76